Así, incluye una nueva versión de la tecnología de guía de ondas patentada por Bose, desarrollada especialmente para este equipo. Dicha guía se ha reducido de 190,5 cm que medía anteriormente a 132 cm sin que se vea alterada la calidad del sonido y se encuentra doblada con precisión dentro de la pequeña caja del sistema, aprovechando, de esta manera, cada centímetro cúbico del espacio acústico. A esto se une un nuevo woofer, también propio de la marca y desarrollado en exclusiva para el sistema, cuatro veces más eficaz que uno tradicional.
Con la combinación de ambos componentes Bose SoundDock 10 se consiguen unos graves de gran profundidad sin necesidad de agrandar la caja o emplear un subwoofer adicional. Están conectados por medio de una exclusiva cubierta metálica multiuso que sella la guía de ondas y el woofer, proporciona blindaje magnético, dirige el aire por la caja y resiste la elevada presión interna creada por el sistema cuando está funcionando.
A todo esto se suman dos exclusivos altavoces Bose Twiddler, que son una combinación de altavoces de agudos y medios. Se encuentran situados en la parte frontal del sistema y hacen que la música se reproduzca con un sonido preciso y de gama completa.
Los componentes electrónicos están directamente ligados a la consecución de su rendimiento y tamaño. Por ello, posee una serie de exclusivos algoritmos de procesamiento digital de señal destinados a mejorar el nivel de detalle y la definición de los instrumentos. La distorsión audible se reduce y se pueden oír todas las frecuencias cuando el volumen es bajo. También integra excelentes amplificadores y una fuente de alimentación conmutada que hacen innecesario el empleo de un transformador externo. Así, el usuario tan sólo tiene que manejar un simple cable de alimentación.
Posee una exclusiva estructura de aislamiento de vibraciones que permite mantener el rendimiento del iPod o el iPhone, independientemente del nivel de escucha. Para la gestión del calor, los componentes se han colocado de manera precisa y bien estudidada con el objetivo de crear un “efecto chimenea”, que permite conseguir una refrigeración eficaz del sistema.
Sonido presente y futuro
Bose SoundDock 10, que cuenta con las certificaciones Made for iPod y Works with iPhone, es compatible con cualquier iPod provisto de rueda de control o iPod Touch, así como el iPhone 3GS, 3G y el modelo iPhone original. Además, ofrece una nueva y exclusiva arquitectura de base de conexión intercambiable que ha sido diseñada para adaptarse a la llegada de nuevos modelos.
Se comercializa con una base de conexión Bluetooth que hace posible la transmisión inalámbrica de música desde un teléfono con reproductor de música bluetooth estéreo.
Entradas y salidas
El nuevo sistema de Bose posee una entrada auxiliar para conectar equipos adicionales como un iPod Shuffle, un reproductor MP3 o un reproductor de CD portátil. Cuenta también con una salida de vídeo que permite reproducir un vídeo almacenado en un iPhone o iPod directamente en el televisor mientras escuha la pista de sonido en el sistema. Finalmente, se comercializa con un mando a distancia por infrarrojos con el que controlar tanto el equipo como las funciones básicas del reproductor o teléfono, así como navegar por las listas de reproducción.
PVPR Bose SoundDock® 10: 799 euros (IVA incluido)