Llega el verano y Apple ha vuelto a revolucionar el “patio” de los móviles con su nuevo iPhone 4. Cuando todos pensaban que no se podía hacer nada nuevo, el amigo Steve Jobs vuelve a sorprender a propios y extraños y consigue que, de nuevo, su flamante aparatito vuelva a estar en los sueños tanto de los que ya lo tienen como del resto.Además, sabiéndose dueños del cotarro, se acabó lo de que sólo lo pueda vender uno. Se abre la veda y ahora todos los operadores tienen su iPhone 4 listo y dispuesto, y además todos lo deben sacar cuando y en la forma en la que quiera el señor Jobs.
¿Es inteligente ceder ante Apple? Pues sí y no. Sí porque entre otras cosas es inevitable. No puedes rechazar el terminal más querido por los usuarios pero también hay que ser algo más pícaro y no caer en el mismo error que ya cometieron otros y pensar que será el medio para expandir tu negocio en la web.
Apple es el único que gana con el usuario de iPhone. Primero porque todos sus servicios y todas las descargas van a sus bolsillos y el operador sólo ve la cuota mensual.
Quizás es por eso que terminales como el Galaxy S o incluso el modesto IVY ofrecen las pistas de hacia donde se dirigen los pasos de las operadoras. Telefónica ya ha mostrado tanto interés en Android, sistema para el que sólo le falta un tablet y ya lo ha pedido, y, pese a que Vodafone le ha ganado por puntos con el lanzamiento de Vodafone 360 Android, no hay que olvidar que Movistar es quien tiene más del 50% del mercado y su próximo paso puede ser el decisivo en esta lucha en la que entró un desconocido y le ha pasado la mano por la cada a todo el sector durante tres años.