El Xbox Adaptive Controller es un mando para Xbox One y Windows 10 que presenta un diseño inclusivo, para el que en la compañía han tenido en cuenta las dificultades a las que se enfrentan algunos jugadores cuando usan el mando tradicional.
Los 'bumpers' y los gatillos suelen ser dos elementos que plantean dificultades a quienes tienen movilidad reducida. Algunas personas tampoco pueden sostener el mando mucho tiempo en sus manos.
La compañía ha explicado, en un comunicado publicado en su web, que la meta era "crear un dispositivo lo más adaptable posible", que permitiera a los jugadores "crear un equipo que funcionara para ellos", y que fuera, además asequible.
El nuevo mando cuenta con dos botones de gran tamaño, que se pueden reprogramar para que ejecuten las acciones de los botones de un controlador de Xbox tradicional. Asimismo, dispone de distintos accesorios que se pueden enganchar, como un joystick.
Xbox Adaptive Controller, que ha sido desarrollado por Microsoft Story Labs, estará disponible a finales de año por un precio recomendado que partirá desde los 99,99 dólares.